Palabras Claves: masturbación, genitales, se toca.
Definición
La masturbación infantil es la estimulación de los propios genitales para obtener placer y satisfacción, por lo que es algo más que la inspección normal de los genitales. Ésta se descubre mientras los niños exploran su cuerpo y es común hasta en un tercio de los niños en edad preescolar. Es importante mencionar que si bien es una práctica preocupante para los padres, muy rara vez o casi nunca es sinónimo de que su hijo tenga un problemas. La auto-estimulación tiene lugar más comúnmente cuando un niño está soñoliento, aburrido, viendo la televisión o bajo stress, y puede presentar una frecuencia de varias veces al día o sólo una vez a la semana.
La masturbación no tiene causas médicas.
Conceptos erróneos y comunes
El error más común que cometen los padres es tratar de eliminar esta estimulación por completo. Esto resulta en un conflicto en el que, inevitablemente, los padres pierden. Los niños no deben ser castigados físicamente, ni debe gritárseles o reprendérseles al respecto. No califique la masturbación como mala, sucia, perversa o pecaminosa.
La auto-estimulación no causa ninguna lesión ni daño físico al cuerpo. No es anormal ni excesiva a menos que se haga premeditadamente en lugares públicos después de los 5 ó 6 años de edad. La práctica de la masturbación no quiere decir que su hijo será demasiado susceptible a excitarse sexualmente, promiscuo o desviado sexual.
Todos estos enfoques sólo producen resistencia y, posiblemente, inhibiciones sexuales más adelante; es decir, sólo si los adultos reaccionan en forma exagerada a este tipo de estimulación de un niño y la hacen aparecer como algo sucio o perverso, ésta le causará daño emocional, como sentimientos de culpa y complejos sexuales.
Cómo reaccionar ante la auto-estimulación de los niños de preescolar
No te asustes. No todos los niños lo hacen, pero la masturbación es algo totalmente normal. No causa ningún daño físico, no presenta ningún riesgo para la salud y no hará que tu hijo se convierta en un “maníaco sexual”. La masturbación en los niños no es sexual (como lo es para los adultos) porque los niños no saben lo que es el sexo. Los niños se estimulan porque resulta agradable. Un niño pequeño puede incluso masturbarse hasta llegar a un orgasmo con jadeos, la cara roja y un gran suspiro al final. Pero esto no es nada de lo que haya que preocuparse en absoluto.
Distráigalo. Trate primero de distraer a su hijo con un juguete o con alguna otra actividad.
Ignórelo. Deje tranquilo a su hijo en estas ocasiones, y no siga vigilándolo. No le prohíba que se acueste sobre el abdomen y no le pregunte si tiene las manos entre las piernas.
Limite el lugar, no la conducta: Si los dos puntos anteriores fallan, explíquele a su hijo: “Sé que te gusta, y está bien que lo hagas en tu cuarto, pero no lo hagas en otro lugar de la casa o cuando estén presentes otras personas“. Cuando los niños tienen 4 ó 5 años de edad, se vuelven sensibles a las opiniones de otras personas y entienden que existe un lugar y momento adecuado.
Tenga objetivos que se puedan alcanzar. Es imposible eliminar este tipo de estimulación. Acepte el hecho de que su hijo ha aprendido a practicarla y que le gusta. Lo único que usted puede hacer es controlar el lugar donde lo hace. Un objetivo razonable es permitirla solamente en su habitación y en el baño. Usted podría decirle a su hijo: “Está bien que hagas eso en tu habitación”. Si usted pasa por alto totalmente la masturbación, sin importar el lugar donde se haga, su hijo pensará que puede hacerlo libremente en cualquier sitio.
Observa tus propias reacciones. Las reacciones de los padres a la masturbación son las que presentan el riesgo más grande para los niños. Si tu hijo se siente culpable por explorar su cuerpo, o si siente que está haciendo algo que es sucio o malo, asociará más adelante en su vida los sentimientos de placer con culpa y vergüenza.
Recuerda que es mejor explicarles a los niños que ese placer es parte de la intimidad y por ello debe hacerse en un sitio seguro, privado y no delante de personas.
Mtra. Jessica Cival
Marzo 2013
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